“En el 2010 me enamoré del campo, estuve varios años inmersa en las montañas y campos Nariñense, conocí campesinos, tierras y cultivos. Entendí en ese momento que la única forma de producir alimentos es de forma orgánica, cuidando nuestros suelos, nuestras aguas, los trabajadores del campo y la salud de todos los consumidores”. 

En 2014 Laura Molander fundadora y gerente de Veko Orgánicos SAS inició el proyecto de producir hortalizas orgánicas para el mercado local en el Quindío. Hoy en día, Veko produce más de 25 hortalizas cultivadas de forma orgánica y emplea a once personas con todas las prestaciones sociales que la ley colombiana estipula. Se cultiva sin usar pesticidas, ni fertilizantes sintéticos, se elaboran los abonos y otros bioinsumos para el manejo orgánico de los cultivos. 

“La agricultura orgánica no es solamente para las huertas caseras, debe ser también para todas las empresas que cultivan la tierra, así podremos tener un verdadero impacto”.